Translate

jueves, 13 de noviembre de 2014

PARANDO SIN PARAR


PARANDO SIN PARAR

¡Eso, eso, préndanle fuego a las llantas!; ¡simón, simón, no dejes que ningún pi #”##$& pase por ahí! ¡A que quiera pasar agárrenlo a pedradas! ¡El pueblo unido jamás será vencido!

Y ahí van pues; aquel tumulto de personas que por intereses propios de un grupo en particular, ponen a sufrir a la economía del país, a violar la libertad de locomoción de miles de guatemaltecos que buscan día a día ganarse el pan diario con esfuerzo y con la gana de ver una Guatemala mejor, que quieren heredar a sus hijos un país productivo y en desarrollo.

Pero no, a estos pequeños grupos que quieren ganarse la vida a costa bloquear carreteras y de afectar seriamente la economía del país; solo ven el interés en el corto plazo sin ver lo que a futuro están arriesgando; y no solo para ellos, sino para sus generaciones, que serán las que pagarán los platos rotos por el descaro de realizar una protesta que según ellos será para beneficio de su comunidad, pero que NO entienden que dañando al país completo automáticamente se traen al suelo la oportunidad de desarrollo para las pequeñas comunidades del país.

Si tanta es la gana de salir a protestar, pues que protesten sin dañar al resto de guatemaltecos que sí quieren trabajar, adicional a ello, si no están de acuerdo con algo, pues que presenten propuestas alternativas para buscar una solución.

Educación, respeto, diálogo, propuestas y punto de equilibrio es lo que se necesita; no actitudes de berrinches que es a lo que estamos acostumbrados.

Ahora bien, no solo por fregar es que la gente sale a protestar; también no existe transparencia por parte de las autoridades lo cual es un detonante para que tango gobierno y estos pequeños grupos explote la relación y lleven al caos total a un país que necesita más construcción que destrucción.

Y así, a un año de elecciones; hay que Educarnos para votar conscientemente; Respetar las ideologías, Dialogar para construir y educar con respeto; proponer positivamente y no destructivamente.

Se escucha fácil, y por supuesto que es fácil de aplicar pero depende mucho de la actitud y acción positiva para sacar adelante al país.

¿Qué queremos enseñar a nuestros hijos?

1.       A ser cavernícolas sin respeto por el ser humano?

2.       Personas con actitud de servicio y de desarrollo personal para construir una sociedad mejor?

Usted decida señor lector, pero al menos yo me estoy asegurando que sea la número 2.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario