Y de nueva cuenta, para variar;
aunque no es un tema nuevo, ya escribí en una oportunidad respecto al tema del
mal procedimiento que existe en la actualidad para la elección de los diputados
para el congreso de la República.
Se habla del tema que, ya estando
en la curul, empiezan a volverse diputados “independientes” o bien a buscar el
mejor postor para ofrecer sus “servicios” en algún otro partido ajeno al cual
inicialmente pertenecía al momento de ser “elegido” democráticamente a través de
la papeleta de votación en donde la gran mayoría de personas ni sabe por
quienes vota; solamente saben que votan por el símbolo del partido de su
simpatía.
Con el respeto del caso hacia la
Constitución de la República de Guatemala; el artículo donde indica que los
candidatos a diputado, con ser mayores de dieciocho años y ser nacidos en este
bello país pueden optar al cargo; debería ser corregido. A los dieciocho años,
qué experiencia o conocimiento de la realidad social puede tener la persona que
resulte electa a diputado? Y fuera de la edad, acaso las personas que quieran
optar al cargo de diputado, tendrán las aptitudes, conocimiento cultural y
social de la realidad guatemalteca?
Por qué mejor no se realiza la
elección de diputados por medio de sus competencias, conocimientos y
experiencias, así como las empresas seleccionan a su personal; a través de
entrevistas, exámenes y test sicológicos.
Esto ayudaría a tener un congreso
de mejor nivel, orientado a trabajar por Guatemala y no para sus partidos políticos.
Tendríamos diputados orientados a trabajar por Guatemala y no para servirse de
ella.
Enfocados en buscar las
soluciones y crear proyectos de leyes en pro del desarrollo del país, en lugar
de estar peleándose para ver quién se queda con la mejor oficina, o que les den
aumentos, o que les brinden los mejores “honorarios” por sus servicios
prestados.
El congreso se ha vuelto un
circo, un show, un mercado donde el nivel profesional de los diputados deja
mucho que desear y deja en evidencia al deficiente proceso que existe en la
actualidad para la elección de estas personas.
Perico con las mismas plumas,
solo que queriendo ser loros. Urge un cambio trascendental en la ley para que
se puedan elegir diputados profesionales y que realmente amen y quieran ver
desarrollar a este bello país; nuestra linda Guatemala.
Roger Castañeda Campollo
@rhcastaneda
Rhcastaneda.book@gmail.com
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