Ingresando sobre la 8va Avenida y 6ta Calle en la zona 1 del centro histórico de la ciudad capital de Guatemala, en Centroamérica; en un lugar que muchos podrían decir que es aburrido o que no es seguro, incluso que tampoco es de su interés de visitar o que no les da confianza, ya sea porque no conocen o no tienen idea del tesoro cultural que alberga este centro de comercio que a lo largo del tiempo ha sido un ícono del guatemalteco y de interés cultural para el extranjero.
Y este es nuestro Mercado Central; el cual al ingresar al parqueo del complejo ya se puede observar la majestuosidad de la parte trasera de Catedral Metropolitana, ubicación también de la entrada a las famosas catacumbas, puertas que son abiertas al público en general para la primer semana de Noviembre, cuando se celebra el día de los Santos Difuntos.
Al dejar el vehículo y buscar el acceso al interior del mercado sobre la 8va Avenida, cuando se va buscando las gradas de acceso, uno puede tomarse un tiempo de "relax" en medio de este bullicio en una pequeña plaza ubicada en las instalaciones del mercado. En donde se puede, ya sea sentarse un rato para descansar o platicar con alguien, o también comprar bolsitas de maicillo para darle de comer a las palomas que son habitantes del lugar.
Luego, pues ya llega el momento de ingresar al recinto, nada extraordinario, pero siempre la advertencia para que podamos mantener el lugar limpio y aseado. Advertencia a lo chapín.
Realmente al ingresar, el lugar es extraordinario en término de las bellezas típicas que se pueden encontrar, desde trajes típicos de regiones del país, así como cerámica, prendas de vestir en donde la originalidad del guatemalteco queda plasmada.
En donde por cierto, en uno de estos locales, está a la venta mi libro LA SOMBRA, a ver quién encuentra mi libro en las próximas 4 fotografías.
Ya finalizando el recorrido dentro de tanta belleza típica de Guatemala, no podría faltar la visita al área de los comedores; en donde se encuentran diversidad de platillos, Atol Blanco, Atol de Elote, Panes con Chile, Revolcado (sesos de res), Panza o Tiras, buche, Patitas a la vinagreta, tostadas con salsa, frijol o guacamol, pacayas envueltas en huevo, en fin.... un sinnúmero de platos que pueden conquistar cualquier exigente paladar.
Creo que las imágenes hablan por si solas. Un lugar seguro, tranquilo y en donde pueden disfrutar de ricos platillos, realizar compras de artesanías para uso personal o bien para regalar. Que por cierto, muy buenos artículos, a buenos precios.
Así que a los que estamos en esta bella tierra del Quetzal, aprovechemos y visitemos nuestro Mercado Central, apoyemos a nuestra gente consumiendo productos guatemaltecos, elaborados por manos guatemaltecas.
Yo seguro regresaré en los próximos días a comerme unas mis tortillas con buche y panza. Mis favoritas.
Hagamos grande nuestro país y apoyemos lo nuestro.
www.rhcastaneda.com
@rhcastaneda (twitter)
Así que a los que estamos en esta bella tierra del Quetzal, aprovechemos y visitemos nuestro Mercado Central, apoyemos a nuestra gente consumiendo productos guatemaltecos, elaborados por manos guatemaltecas.
Yo seguro regresaré en los próximos días a comerme unas mis tortillas con buche y panza. Mis favoritas.
Hagamos grande nuestro país y apoyemos lo nuestro.
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@rhcastaneda (twitter)
Excelente punto de vista de nuestro patrimonio. Sin lugar a dudas, el Mercado Central es un punto cultural dentro de nuestro Centro Histórico.
ResponderEliminarGracias por la lectura; en efecto es un punto que cuenta con historia y que han dejado un legado de anécdotas y vivencias. Hay que estar siempre apoyando lo nuestro y velando para que estos lugares se pierdan en la historia.
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